El «Pegging», es una práctica sexual relativamente nueva en la que es necesario estar dispuestos a romper prejuicios respecto a género y la masculinidad para disfrutar de ella.
Por: Fernando Sandoval.
| Viernes 20 de mayo, 2022, Ciudad de México.
| Tiempo de lectura: 7 min.
El pegging rompe masculinidades ya que presenta a los hombres más formas de sostener una relación sexual satisfactoria con su pareja, y que el hecho de experimentar no está relacionado con la orientación sexual; hay que recordar que ésta se define por la persona con la que se quiere tener una relación sentimental y sexual. El Pegging únicamente se realiza entre hombre y mujer, por lo que es una práctica totalmente heterosexual.
Existen buenas razones para disfrutar de esta práctica; primero, estimula directamente el «punto P» del hombre (el cual se encuentra en la zona rectal y se encarga del clímax masculino); segundo, la idea de ser penetrado por una mujer dominante, ya es para muchos un orgasmo mental y una fantasía que puede hacerse realidad si existe una buena comunicación entre pareja.
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Para dejarlo más claro, el pegging es una práctica sexual en la que solamente la mujer penetra al hombre utilizando un consolador que se sostiene con un arnés el cual se ajusta en la cintura y la cadera.
¿Cómo empezar?
La comunicación ante todo, se debe hablar con la pareja, explicar que es algo que se quiere hacer y asegurar que los dos estén totalmente de acuerdo con la penetración, sobre todo el hombre.
Una manera de empezar el «Pegging«, es que la mujer introduzca los dedos en la zona anal del hombre, y llevar acabo movientes placenteros, hasta alcanzar el clímax.
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Lo verdaderamente interesante es cuando se realiza con un arnés que se coloca la mujer, los dos pueden acordar sobre el tamaño correcto, donde cada uno se sienta cómodo y seguros, e intentar el » Pegging» siempre manteniendo la comunicación y asegurar que ambos la estén pasando bien.
Hay que elegir bien los materiales con los que se llevará acabo esta práctica, ya que la zona anal es estrecha y no lubrica por si sola, por lo cual es importante tener un lubricante a la mano; el uso de condón también es necesario o de lo contrario lavar perfectamente el dildo después de la relación sexual.
Como el propósito de esta práctica es invertir los roles impuestos tradicionalmente, es importante que la mujer tome el control, pero también dejar que el varón vaya marcando el ritmo y decida que tan lejos está dispuesto a llegar.
Es importante mantener una relación sexual higiénica, el «Pegging» amerita que el hombre tenga el área anal lista para la diversión, hay distintas maneras, pero la más accesible es conseguir un «Edema», el proceso es sencillo. El deposito se llena con agua tibia, se cierra con la tapa. que es la parte que se introduce en el ano, se mete hasta donde uno considere óptimo, se oprime el edema para liberar el agua y se saca sin dejar de apretar, esto ultimo para evitar que el agua sucia regrese al edema.
Poco a poco esta practica se va popularizando y rompiendo juiciosos de genero, junto con otras practicas sexuales, es importante que, hombres y mujeres, estén dispuestos a experimentar cosas nuevas junto que su pareja, salir de la monotonía, y eso conlleva aprender y volver a construir prejuicios sobre el sexo.
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