Los Gallaghers son una familia trágicamente disfuncional, con un padre alcohólico que es capaz de vender a sus hijos por una cerveza, Fiona Gallagher (Emmy Rossum), la hermana mayor de veintiún años que toma el papel de matriarca para cuidar de sus 5 hermanos menores.
Por: Fernando Sandoval
| Viernes 8 abril, 2022, Ciudad de México
| Tiempo de lectura: 6 min

La adaptación estadounidense «Shameless» disponible en la plataforma de streaming HBO Max, del guionista británico, Paul Abbout, permite apreciar desde una óptica cruda como es la vida en un ghetto en la parte más pobre de Ilinois, Chicago, retratando las costumbres culturales más cuestionables de USA, así como un florido lenguaje local, la facilidad de adquirir armas, facciones entre personas de raza blanca y negra y la cultura entorno al ejército en la juventud.
La serie es un viaje que va desde el humor negro hasta una tragedia que deja ver a la sociedad americana desde los zapatos de cada uno de los miembros de la familia Gallagher.
La evolución de los personajes es tan evidente que sentirán que están creciendo con ellos; Fiona se descuida a sí misma por criar a sus hermanos; Lip, el chico prodigio que desearás que no desperdicie su potencial; Ian, el cual a nadie le importa que sea gay, pero cuando su trastorno bipolar aparece le queda bien el apellido “Gallagher”; Debbie y Carl son los pequeños que nos sorprenderán con sus buenas y malas decisiones,; y, por último, Lian, del cual nadie sabe porqué es un niño de color.

Hablar de «Shameless» es hablar del auto sabotaje, si alguna vez en la vida se han impedido ser feliz, se identificarán con cada uno de los integrantes de la familia Gallagher.
En relaciones de pareja, Fiona nos mantendrá tensos, esperando que no lo arruine con alguno de sus novios, hay un personaje en específico que representa el potencial perdido de una buena mente gracias a problemas cotidianos como el Alcoholismo.
En general no querrán que ninguno de los integrantes de la familia sufra, pero esto es inevitable, ya que tampoco son unos santos.
No necesariamente un buen personaje tiene que evolucionar a ser mejor para tener un buen desarrollo, como un contraste hacia la vida real, se involuciona y se vuelve a cometer los mismos errores, en el amor, trabajo, escuela, familia etc. Y esto es completamente normal, aunque no sería algo sano seguir los pasos de los Gallagher.
No existen los finales felices
Todos los personajes de «Shameless» recuerdan que la vida es una bonita tragedia, reflejan lo miserable que pueden ser todos los eventos de la vida, hacen cuestionar si realmente vale la pena pasar todo el sufrimiento que conlleva una mísera felicidad fugaz.

Pero no es una serie deprimente, muestra que entre todo el caos siempre habrá momentos de los cuales va a ser necesario madurar como personas, de lo contrario, el espirar de caos, de volver a cometer los mismo errores, será un constante en la vida.
Se darán cuenta que no son tan diferentes a cada miembro de la familia Gallagher, todos en la vida se han auto saboteado, han hechos cosas de las cuales no están orgullosos, pero eso no define a las personas en sus historias. Y no importa que no vengas de un ghetto de Ilinois, después de ver «Shameless» pueden llegar a ser un Gallagher.